miércoles, 8 de octubre de 2014

(1951) John Wyndham - El día de los trífidos



(Reseña publicada originalmente en Goodreads el 2 de octubre de 2014)


"Cuando un día que usted sabe que es miércoles comienza como si fuese domingo, algo anda muy mal en alguna parte".

Así comienza "El día de los trífidos" de John Wyndham, novela fundacional de todo ese subgénero de mundos postapocalípticos, mundos devastados y asolados por la tragedia. La premisa de la que parte es sencilla: un buen día, sin mediar aviso, la humanidad se queda ciega. La noche anterior hubo un espectáculo de luces y colores en el cielo, como un cometa o una lluvia de meteoritos. Los únicos que conservan la vista son aquellos que no fueron testigos del espectáculo nocturno. Y, al mismo tiempo, la humanidad ha venido sentando las bases de la biotecnología, con la cual ha empezado a manipular y crear especies biológicas. Y entonces, el protagonista, Bill Masen despierta...

"El día de los Trífidos" es una novela dura, llena de paisajes de desolación y muerte. A través de sus páginas acompañaremos a Bill Masen en una carrera agónica por la salvación. Momentos crueles, decisiones morales límite y efluvios de carne en descomposición son las constantes de una novela que es directamente responsable de que su impacto en el lector actual no sea mayor del que es. Un peso, algunos dirán, fácilmente sobrellevable debido a que su responsabilidad es producto de la incalculable influencia que ha ejercido sobre sus seguidoras.


Una de las lecturas más interesantes que ofrece esta novela es sobre la banalización de la novedad, la capacidad humana para hacer común lo extraordinario. En sus paginas, Wyndham nos hace testigos de suicidios, eutanasias y asesinatos. Pero también de violencia más sutil, ejercida desde el poder de la masa y desde el instinto gregario del individuo, en una especie de relación de bondage psicosocial. Sin embargo, los personajes terminan por aceptar que el mundo tal y como lo conocían ha muerto, que el suelo sobre el que se sustentaban los viejos derechos y deberes ha sido removido. Y con ello, aceptan toda la tragedia que se les viene encima. Pero lo hacen a un ritmo notablemente superior del que es capaz el lector. El lector se ve sobrepasado y son los personajes con su actos quienes se encargan de transmitirle el mensaje de que les va la vida en ello, o adaptarse a las nuevas reglas o morir. Este mensaje, no obstante, ha sido notablemente profundizado por obras posteriores.

La escritura de Wyndham es austera pero convincente. No es ningún mago del lenguaje, pero tampoco lo necesita la historia que pretende contarnos. El libro está narrado en primera persona a través de Bill Masen, que será el único personaje que lleguemos a conocer en profundidad. El resto de personajes tenderán a ser esquemáticos, limitándose a cumplir funciones conceptuales según los propósitos de Wyndham. Y es que no se puede olvidar que toda historia de catástrofes y mundos postapocalípticos trae consigo una visión antropológica del hombre en su estado de naturaleza. Wyndham no tiene tanto interés en conocer el sustrato íntimo de cada ser humano en esas condiciones como las formas de organización proto-social resultantes de la tragedia. Por ello, veremos personajes hobbessianos, personajes rousseaunianos, personajes maquiavélicos y, en general, personajes que se pueden adjetivar sucesivamente referenciándolos a apellidos de pensadores o a conceptos filosófico-políticos.

El libro está coloreado también con una historia de amor que, en su desarrollo, sirve de enésimo homenaje a la historia de Odiseo y Penélope. No es que sea la gran historia de amor, pero sirve para aportar más cromatismo a una novela compuesta de tonalidades lúgubres.

"Y bailamos, en la orilla de un ignorado futuro, con el eco de un desvanecido pasado".

No he querido mencionar nada de los trífidos hasta el momento. Creo que la novela puede sustentarse a sí misma sin la amenaza externa que suponen, aunque esa amenaza sea el motor de muchos de los acontecimientos de la novela. En mi opinión, las cosas más valiosas que tiene quedecirnos esta novela hacen referencia a las relaciones de humanos entre ellos más que a las relaciones de humanos con x, sea x critters, gremlins, zombies o, como en este caso, trífidos.

Por último, me gustaría mencionar un par de apuntes. El primero, lo deudora que es esa obra de Saramago, el "Ensayo sobre la ceguera", con respecto a esta otra de Wyndham. El segundo, el guiño premonitorio de la teoría del gen del lenguaje que contiene la novela.

"Los trífidos son tan diferentes. Me dan la impresión de que contradijeran todo lo que sabemos acerca de las características hereditarias. ¿Hay en la abeja o el trífido un gen de organización social, o tiene una hormiga algún gen de arquitectura? Y si ellos tienen algo así, ¿cómo no hemos desarrollado nosotros un gen del lenguaje o del arte culinario?"

Jaque mate, Steven Pinker.

Calificación:


No hay comentarios :

Publicar un comentario

Licencia de Creative Commons
Conclusión Irrelevante by Jose Gaona is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional License.
Puede hallar permisos más allá de los concedidos con esta licencia en http://conclusionirrelevante.blogspot.com.es/p/licencia.html